Algunos representantes del Ministerio Público actúan al margen de la ley.
El ministro de Gobierno, Jorge Pérez, deploró ayer que la justicia se haya convertido en un incordio y que marche a contrapelo de la Policía en su combate al crimen en Bolivia.
La autoridad, en contacto con los medios estatales desde la ciudad de Santa Cruz, cuestionó el papel actual que juegan los operadores de justicia (jueces y fiscales) en los diferentes casos.
El Ministro de Gobierno explicó que la semana pasada un fiscal, al que no identificó, solicitó la libertad de tres miembros de las Fuerzas Armadas que fueron aprehendidos por una supuesta complicidad en la muerte de un sicario que actuaba en la zona de Urubó, Santa Cruz. El móvil del habría sido por deudas impagas y extorsión.
Dijo que el agente del Ministeio Público solicitó a la jueza que conocía el caso la liberación de los militares con medidas sustitutivas a la detención preventiva.
Según Pérez, el fiscal había intercedido por los uniformados "para no arruinar su carrera militar" sin importarle el crimen que cometieron.
La autoridad aseguró que el funcionario público actuó al margen de la ley.
PROFUNDA crisis . El titular de Gobierno expresó que el actuar de los reponsables de impartir justicia a sumido en una profunda crisis a este sector.
"Nosotros vemos que se refleja una crisis y se puede corroborar en los casos que le estoy citando. Es una lectura personal y que coincidimos con nuestros mandatarios: la administración de nuestra justicia está tocando fondo y requiere que todos trabajemos para resolver dicha crisis".
El ministro de gobierno en un recuento rápido de este año dijo que en la ciudad de santa cruz la policía resolvió 88 casos. esclareció 10 en enero, 22 en febrero, 14 en marzo, 3 en abril, 11 en mayo, 7 en junio, 20 en julio uno en agosto.
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