El suspendido magistrado Gualberto Cusi no soportó la extensa lectura de pruebas y su estado de salud se deterioró hasta el punto de romper el llanto y desvanecerse en pleno juicio de responsabilidades que impulsa el Movimiento Al Socialismo (MAS) en la Cámara de Senadores.
Su abogado, Williams Bascopé relató que las penurias que pasa la exautoridad no tiene fin y la semana pasada su madre tuvo que vender su ropa para sustentar el tratamiento y la alimentación especial que requiere el indígena.
"Una madre no podía seguir viendo eso y fue a vender sus polleras, que fue el acto que acabó con el estado anímico del magistrado, y no podemos seguir en esta situación", dijo el abogado mientras Cusi rompía en llanto impotente.
El presidente del tribunal, José Alberto Gonzáles consultó con el Ministerio Público que está representado por el diputado Víctor Borda, quien dijo que en vista del estado de salud de Cusi se adhería al pedido de la defensa y suspendieron el proceso hasta el 24 de abril.
Al abandonar el hemiciclo parlamentario y el edificio congresal, Cusi se negó a realizar cualquier declaración y sus abogados pidieron excusas a los medios y dijeron que se debe considerar el estado de ánimo del acusado.
"Mi madre mi pidió que me entregue al poder para hagan lo que quieran conmigo", escribió el indígena en su cuenta en Facebook. La pasada semana lo declararon en rebeldía, dispusieron su arraigo e instruyeron su aprehensión.
El proceso data de 2014 y fue reiniciado la pasada gestión. Ahora encara la etapa de presentación de pruebas documentales y presuntamente en los próximos días se dictará una sentencia.
Cusi es acusado por la presunta comisión de los delitos de prevaricato, resoluciones contrarias a la Constitución y a las leyes e incumplimiento de deberes, tras la suspensión de la aplicación de la Ley del Notariado.
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