Los postulantes para magistrados del Órgano Judicial serán evaluados con el mismo sistema que se emplea para docentes de las universidades, por lo que el puntaje mínimo de aprobación será 56 sobre 100 puntos, informó el presidente de la Cámara de Senadores, José Alberto Gonzales.
“El puntaje mínimo con el cual estarían ingresando a consideración de la Asamblea Legislativa es de 56 puntos sobre 100, esa es la ponderación que hace el sistema universitario para la calificación de los docentes de pre y post grado”, aseguró Gonzales.
En tanto, la presidenta de la Cámara de Diputados, Gabriela Montaño, manifestó que el sistema de evaluación fue planteado por el sistema universitario, por lo que se garantiza que el proceso de preselección de postulantes se desarrolle de manera transparente, para que se cuente con los mejores abogados que deseen ocupar los cargos de magistrados.
“Es posible que existan postulantes que obtengan una puntuación entre 80 y 90 puntos, eso elevará la posibilidad que tengamos a los mejores postulantes; hemos optado por un número que técnicamente es avalado por el sistema universitario para el ingresos de los docentes de pre y postgrado, el sistema universitario nos hizo llegar esta propuesta”, mencionó.
La comisión del sistema universitario estará conformada por 8 académicos, especialistas en las áreas relacionadas con el proceso de preselección, los cuales participarán de los procesos de evaluación curricular y del examen escrito.
PROCESO DE EVALUACIÓN
En el reglamento que está en discusión, se establece que el sistema de calificación está divido en tres etapas: la evaluación curricular tendrá una ponderación de 40 puntos, el examen escrito es de 30 puntos y, finalmente, la entrevista tendrá también una ponderación de 30 puntos, sumando un total de 100 puntos.
En el parágrafo II, del articulo 18, del Reglamento del Proceso de Preselección para autoridades del Órgano Judicial, establece que el tiempo del proceso de evaluación es de 7 días para la verificación de curricular, 2 días para la revisión de la prueba escrita y un plazo de 15 días para las entrevistas.
Por su parte, el senador de Unidad Demócrata, Edwin Rodríguez, manifestó que esta evaluación no será del todo transparente, debido a que no se llegó a consenso alguno con el partido oficialista, por lo que no avalarán la selección de estos candidatos, si hay injerencia de los asambleístas del Movimiento al Socialismo.
“El oficialismo debe ser totalmente claro, si se propone dar autonomía plena a la comisión del sistema universitario, para que puedan evaluar a los postulantes, no debe existir intromisión de los asambleístas que son sindicalistas o gremialistas”, puntualizó.
ENTREVISTA
En la fase de entrevista, están evaluando que la comisión académica sea parte y que tenga una activa participación para cuestionar los candidatos, además de la elaboración de las preguntas. “En todo este proceso la comisión del sistema universitario va a actuar como si fuera un diputado; no estará como un observador como están queriendo hacer creer a los opositores”, concluyó.
DIÁLOGO
En este caso, Gabriela Montaño espera que los opositores puedan participar de la mesa multipartidaria para continuar en el debate del reglamento, con la finalidad de que pueda llegarse a un consenso sobre este punto. Convocó a algunos miembros responsables de la oposición y que no se dejen entrampar por los miembros radicales.
“Ya debiéramos estar debatiendo el reglamento, deberíamos estar trabajando punto por punto. Según ellos, nosotros no queremos negociar y debatir; sin embargo se puede evidenciar que muchos de los asambleístas opositores ni siquiera retornaron de sus regiones”, mencionó.
Con relación a este punto de discusión, el senador Rodríguez indicó que, como bancada de Unidad Demócrata, participarán de la misma pero de manera obligatoria para evitar que se les inicie algún proceso por incumplimiento deberes.
SESIÓN
Este sábado, 29 del mes en curso, el Presidente del Senado informó que se convocará a sesión de Asamblea Legislativa para aprobar el reglamento de la preselección de postulantes de magistrados del Tribunal Constitucional Plurinacional, Tribunal Supremo de Justicia, Tribunal Agroambiental y el Consejo de la Magistratura.
En 2011, el Movimiento al Socialismo rechazó que el proceso de preselección sea bajo criterios meritocráticos, tampoco aceptó una evaluación en base a puntaje. Seis años después reconocen que el cuoteo de las organizaciones sociales no sirvió y que los elegidos no eran los mejores.
Ese año sólo con el voto del MAS se preseleccionó a los candidatos, pues los opositores denunciaron una elección politizada, de gente afín al partido gobernante y no así de los mejores profesionales.
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