Mery Limachi, esposa del exfiscal Humberto Quispe, fue aprehendida e imputada por el delito de legitimación de ganancias ilícitas, adquiridas por la exautoridad en operativos y procesos penales montados, por los que logró acumular una gran cantidad de bienes inmuebles y vehículos, según los indicios presentados por la Fiscalía.
Según la relación de hechos, durante su corta gestión (2011 - 2015) como fiscal de materia, Quispe protagonizó varios “volteos” de dinero y realizó innumerables operativos, con apoyo de efectivos de inteligencia, allanamientos, aprehensiones y secuestro de objetos de valor, incluidas joyas y dinero en efectivo.
Con el fin de legitimar lo incautado y apropiarse de objetos no reclamados, en septiembre de 2013, Quispe, como fiscal en la zona Sur, inicia el proceso con el número de registro en la Fiscalía ZSR1809/13, en el que figura como víctima de robo agravado, quien en 2014 sería su esposa Mery Limachi, pero ya tenía otra relación, según se verifica con la fecha del certificado de nacimiento de uno de sus hijos.
Según los documentos a los que accedió EL DIARIO, el caso fue puesto en conocimiento del juez octavo cautelar, Orlando Rojas, y durante el proceso investigativo esta autoridad emitió para Quispe ocho órdenes de allanamiento.
Ante las denuncias por extorsión y la destitución de Quispe de la Fiscalía, en febrero de 2015, el caso pasó a manos del fiscal de materia, también de la zona Sur, Carlos Michel Andrade (destituido en marzo de 2015), quien presentó acusación formal contra cinco personas y el proceso fue remitido al tribunal quinto de sentencia, donde al momento se encuentra paralizado.
La denuncia señala que lo irregular de este caso es que en la fiscalía no figura el registro de ese caso, por lo que se pone en duda la legalidad de las acciones de todas las autoridades que intervinieron.
Este es uno de los indicios que hoy, en la audiencia cautelar, será expuesto ante el juez, donde se pedirá la detención preventiva de Limachi, quien a la fecha no ha logrado explicar el origen de cerca de un millón de dólares, que es el cálculo que se hace sobre su patrimonio, entre bienes inmuebles y vehículos, que fueron puestos a nombre de terceros, con el fin de camuflar el ilícito.
En los documentos se verifica la contradicción en la defensa de Quispe, pues niegan ser propietarios de inmuebles, pero los mismos inmuebles, aparecen en la denuncia del supuesto caso montado con su esposa.
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