La Comisión Mixta de Constitución de la Asamblea Legislativa concluyó con la calificación de méritos de los postulantes al Tribunal Supremo de Justicia y al Tribunal Constitucional Plurinacional. En esta fase, solo el 20 por ciento de los postulantes obtuvo una ponderación arriba de los 30 puntos. Este viernes se realizará el examen escrito.
Los 269 postulantes para ambos tribunales pasarán a la siguiente fase de la evaluación que es el examen escrito el mismo que se desarrollará el 18 de agosto en instalaciones del Banco Central de Bolivia (BCB).
Entretanto, la senadora Adriana Salvatierra (MAS) manifestó que la calificación de méritos no es excluyente para que los postulantes ingresen al examen escrito, pero se tomará en cuenta los resultados de ambas evaluaciones para que sean habilitados a la fase de entrevista.
“La etapa de calificación de méritos no es una etapa excluyente para los participantes, la suma que obtengan en esta fase será sumada con la ponderación del examen escrito para que puedan ser habilitados a la entrevista, el puntaje mínimo es de 36 puntos”, señaló.
CALIFICACIÓN
La evaluación meritocrática de los candidatos era sobre la base de 40 puntos que está dividida en tres criterios: la formación académica con una ponderación de 15 puntos, la formación profesional 15 puntos y la producción intelectual que tiene una puntuación de 10.
Los postulantes para el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) con mejor calificación son Jaime Perez Viviani con 36 puntos, Nelma Teresa Tito Araujo con 35, Ivan Ramiro Campero Villalba con 38 puntos, expresidente del tribunal departamental de justicia de la paz y David Baptista Velásquez con 35.5 puntos.
En el caso de los postulantes para el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) destacan Ivan Sandor Tapia Pinto con 34 puntos, Maritza Sánchez Gil que obtuvo una ponderación de 31 puntos.
Según los datos preliminares de la oposición solo el 20 por ciento de los aspirantes obtuvieron una calificación por arriba de los 30 puntos, a su criterio esto se hubiese revertido si la asamblea modificaba el reglamento de preselección, afirmó el diputado de Unidad Demócrata (UD), Wilson Santamaría.
“Esto confirma nuestra posición, el proceso nunca fue competitivo. Si hubiéramos tenido a los mejores abogados este proceso sería al revés y eso es la consecuencia de no haber aprobado un reglamento con reglas distintas el cual garantice un proceso con alto nivel académico”, declaró.
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